Saturday, October 6, 2012

Adios Yvonne

                                       
Porque la muerte siempre nos sorprende y nos deja perplejos ante la vida que tenemos, fuimos al hospital. La familia merma y me encuentro con varios niños. Juegan, preguntan, se les dice que no griten. Crecen, se renueva la vida. Yvonne esta allí. ¿Está? Creo que estamos nosotros junto a ella, tan sola. Miro su cara. Ahora la reconozco. Esa nariz que por años no había visto, muy de los Calvo.  Su piel blanca. Y que solitaria la muerte. El sonido monótono de las maquinas interrumpe los pequeños espacios de silencio. Hablamos de la lluvia, de los hijos que no vinieron, justificamos a los vivos. Miro a las mujeres que hablan entre ellas. Solo mujeres. Familia de mujeres fuertes y peleonas. Voy a la máquina de café. Sale un agua de color río y lo tomo. Me aparto y respiro. Hago planes. Recuerdo algo por hacer. Alguien me explica cosas de  unos papeles que se tienen que firmar. Es para estar preparado, dice. Contesto que sí,  pero no entiendo mucho. Las voy mirando a todas. Rasgos en sus rostros, actitudes similares. Estoy cansado. Vuelvo a observar su cara. Esa será después su imagen. Nos vamos. Aguanto la puerta del elevador para que entremos todos. ¿Nos resistirá?, bromea alguien. Adiós Yvonne, pienso. Afuera, las luces se reflejan en los charcos que la lluvia dejó.


5 comments:

  1. En Paz Descanse.. B<>S

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  2. Muy serena reflexion, de una sencillez que aterra por lo cercana que nos puede resultar a todos. Sin excesos de ningun tipo, supiste dar una idea de lo que es la vida y la muerte, aterradora por la soledad que trae.
    Me alegra --si cabe la palabra en momentos asi-- haberlo leido.
    Yvonne de una belleza tremenda.

    JP

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  3. Gracias, Marco, por tu mensaje de recordacion de Ivonne, que se fue de repente.
    Gracias de nuevo
    Tanya

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